Jeremy Pérez es un joven arquero de Cuarta División, que como muchos jóvenes, sueña con convertirse en futbolista profesional, pero la vida lo llevó a jugar el partido más difícil ante el fallecimiento de su madre, quien era su principal motor. Sin embargo, Jeremy encontró refugió y motivación bajo los tres postes.
La promesa.
"Fue una desgracia para mí, había llegado de entrenar y me dieron una noticia que no fue muy agradable, a mi madre la había perdido y pues ella siempre quiso verme en mis partidos y en esa ocasión, que estaba en el hospital, me había prometido que tarde o temprano me iba a ver jugar, porque me habían dado la oportunidad de quedarme en un equipo de Cuarta División y ahora que no está, me motivó para ir a ese partido".
"Se te viene todo a la mente durante el partido, se te vienen mil problemas, discusiones familiares que no van a querer que vayas a seguir con el futbol, que no vas a vivir de ello, sueños que tal vez varios quisiéramos cumplir, que por cualquier cosa negativa que nos pasa no concluimos y pues no me importó y en ese momento me dije que, si se va mi mamá que sea por algo y le terminé dedicando en aquella ocasión el partido, pese a lo mal que estaba, trate de dar el cien para mi equipo".
Un sueño cumplido.
"Cuando fui a visorias, mi madre se enteró del equipo y todo eso y me invitaron a que fuera y me quedé, fue una alegría para mi mamá ya que desde chiquito siempre soñaba con estar en un equipo de alguna división o estar en una escuelita. En ese entonces no hubo posibilidad de que me apoyaran para seguir con mi sueño".
"Ahora para mí sigue demostrar en el equipo que estoy que hay mucho por explotar, porqué entrenar y a la larga, que me han dado posibilidades y oportunidades de estar en un equipo de segunda y tercera división".
Construyendo tu propio legado.
"Desde muy chico aprendí a ganarme las cosas, así que abrimos un micronegocio y de ahí mi plan era sacarla de trabajar a mi mamá y que me viera jugar más, que me viera entrenar en lugar de estar trabajando y generando dinero y ahora tendré la responsabilidad yo, como hombre de casa, de estar con mis hermanos y a pesar de eso, me gustaría que me vieran en mis partidos".
No hay motivos para dejar de soñar.
"No dejen de luchar por sus sueños, que jamás se rindan, yo también a pesar de todo eso pues me dio en esa época una enfermedad y no dejé de jugar y es momento de luchar, que no se rindan, no hay circunstancias ni motivos por dejar de soñar, no hay que dejar de luchar hasta el ultimo segundo, a pesar de que te queden muy lejos los entrenamientos o no tengas la posibilidad de entrenar, ver videos y entrenar tu mismo por tu propia cuenta".
Jeremy se desempeña como guardameta en CIFUT, un club de futbol que pertenece a la Cuarta División de la Liga Mexicana Premier Asociación y que actualmente se encuentra luchando por ascender a la Tercera División de dicho certamen.
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